martes, 14 de octubre de 2008

IMPORTANCIA DEL PROYECTO EN EL ASPECTO AMBIENTAL Y SOCIAL DEL AGUA Y CONSECUENCIAS DE LA APLICACIÓN DE NUESTRA PROPUESTA



La finalidad del proyecto llevado a cabo consiste en proveer una fuente estable de consulta de los datos obtenidos, para facilitar el desarrollo de investigaciones tecnológicas basadas en la utilización del agua como fuente de energía.

El uso del agua para la producción de gas combustible supone una alternativa capaz de solucionar, al menos de forma parcial, la situación medioambiental actual, caracterizada por el aumento exponencial del CO2 en la atmósfera y el consecuente aumento de la temperatura que esto ocasiona, conocido como efecto invernadero.

Esta idea es el motor del proyecto EL PODER DEL AGUA, ya que la investigación realizada constituye la base científica de la nueva tecnología del agua como fuente de combustibles limpios.

Las otras alternativas capaces de saciar las demandas actuales a nivel doméstico e industrial, como el biodiesel y el biogás, emiten una cantidad neta de CO2 a la atmósfera que no es fijada por las plantas en el largo plazo, porque para la producción de biocombustibles se realiza el monocultivo, que arruina los suelos e imposibilitan el crecimiento de nuevas plantas.

Es cierto, entonces, que el CO2 que emiten es fijado por la vegetación, pero si cada vez existen menos plantas va quedando una cantidad neta de CO2 que no cumple el ciclo y que, luego, se va acumulando.

Las demás fuentes energéticas limpias, como la solar, eólica, geotérmica o mareomotriz, no son capaces de saciar la demanda directa de ciertas aplicaciones sin tener que realizar un cambio radical en el sistema. Por ejemplo, para alimentar todos los motores de automóviles con energía eléctrica habría que cambiar de fondo toda la estructura de la producción de autos.

Si actúan juntamente con el agua, aprovechando su potencial para producir gases combustibles gracias al paso de la corriente eléctrica, pueden saciar la demanda de automóviles, artefactos de calefacción, etc. que utilicen habitualmente gases combustibles.

El gas oxhídrico es superior a cualquier otra mezcla gaseosa combustible porque:

No emite gases tóxicos para la atmósfera, simplemente vapor de agua.

La temperatura de su llama es muy alta, incluso mayor a la del hidrógeno quemándose en aire, pues en el gas oxhídrico los gases se hallan en proporción estequiométricamente correcta.

Puede ser producido en demanda, a medida que se consume, a partir de agua, por lo que, si bien es un gas riesgoso, no implica un peligro mayor, porque no debe ser almacenado en ningún momento, a diferencia del hidrógeno puro y el gas natural.

El hecho de que se produzca sólo agua es una ventaja esencial, pues la acumulación continua de CO2 es uno de los problemas más graves a nivel ambiental que deben enfrentarse en la actualidad.

Los informes del PNUMA sobre la eliminación del CO2 de la atmósfera proponen soluciones muy poco viables de ser llevadas a cabo, y que además generan perjuicios para los hábitats naturales de la flora y la fauna, lo que afecta directamente la vida de la sociedad.

El único proceso que debería realizarse al agua para ser electrolizada es una desmineralización que elimine cationes y aniones de compuestos peligrosos con un pequeño potencial de reducción, de manera que son propensos a oxidarse o reducirse en la celda y contaminar el agua de la celda, o transformarse en gases que sean liberados con el gas oxhídrico y contaminen la atmósfera.

De cualquier forma, un proceso de desmineralización por microfiltros o membranas semipermeables que retengan los compuestos en cuestión, es mucho menos costoso y ecológicamente limpio que la destilación del petróleo o la producción de biocombustibles.

De esta forma se evidencia que no sería necesario el uso de agua dulce, que constituye una sustancia muy escasa. Por el contrario, contribuiría a producir agua limpia, pues de la combustión del hidrógeno se obtiene agua pura.

El costo que acarrearía esta tecnología sería el de la corriente eléctrica: hace falta mucha energía eléctrica para saciar la demanda de los artefactos antes mencionados, lo que provocaría un encarecimiento del producto, que superaría lo que hoy en día se paga por el gas natural para obtener la misma cantidad de energía.

Sin embargo, cabe recordar que la tecnología del agua contribuiría a disminuir la concentración de CO2 en la atmósfera, dado que se evitaría el uso de combustibles fósiles o compuestos orgánicos.

Así, esta idea supone una disminución en los costos de extracción de gases invernadero de la atmósfera, y una inversión en producción de energía eléctrica y transporte de la misma. El resultado neto sería una atmósfera más limpia, una menor destrucción de los suelos y una disminución paulatina de la temperatura global.

En resumen, la utilización del agua como fuente de gases combustibles constituye una solución sustentable a la inminente escasez de combustibles fósiles, pues no genera otra contaminación más que la provocada por los medios que usen para transportar energía eléctrica, contribuyendo con la vida en sociedad a escala regional y global.

Se desaceleraría la tala indiscriminada, el monocultivo de soja y maíz para la producción de alimentos (cada vez menos) y biocombustibles (cada vez más), la consecuente destrucción de los suelos y el desequilibrio ecológico que esto genera.

Por lo tanto la vegetación podría captar el CO2 en exceso de la atmósfera ya que dejarían de emitirse grandes cantidades del mismo. Esto provoca que se vuelvan a tener niveles aceptables de CO2 y se frene el calentamiento global que éste produce.

El vapor de agua emitido tiene la capacidad de absorber calor, como sucede con el agua en general. Por esto, ayudaría a hacer más templado el clima global, especialmente en lugares donde se aplique la tecnología (ciudades, zonas industriales). Este hecho es de gran relevancia dado que en los últimos años las olas de calor, principalmente en Europa y Estados Unidos, se han cobrado varias víctimas fatales.

En general, los cambios favorables que produciría son muy amplios, ya que abarcan desde el medio ambiente hasta la vida de la gente, tanto a nivel local como global. Su aplicación masiva produciría el cambio que el planeta necesita.

Este es el PODER DEL AGUA.

elpoderdelagua@gmail.com